Nos íbamos con Octavio a las 22:00 para reunirnos con Mike y Marguerite; dos Ontarienses quienes están hospedados en el Hotel Isla del Sur y nos acompañan. Bajo una noche clara y llena de estrellas vamos a la playa frente a donde estaba situada Villa Capricho. Seguimos atentamente las instrucciones de Octavio quien nos explica cómo detectar la presencia de una tortuga de mar de la mejor manera; no se puede utilizar una luz directa, esto puede asustar a las tortugas y hacerlas retroceder en el mar. Nuestros ojos se acostumbran rápidamente a la oscuridad y comenzamos a observar las huellas de estos gigantes los cuales contrastan con la arena blanca. Pronto comenzamos a ver los enormes óvalos oscuros; a menos de medio kilómetro de distancia 7 tortugas. Estas nos permitieron observar todos los pasos, algunas se dirigían hacia la playa para encontrar el lugar correcto dónde cavar el nido unas lo estaban cavando y otras ya regresaban al mar y la atracción principal..... ¡una estaba poniendo un huevo en ese momento!. Cuando las tortugas abandonan el mar, se debe permanecer a distancia y esperar tranquilamente hasta que cruce la playa. Cuando están cavando el nido van poniendo los huevos, podemos acercarnos lentamente por detrás. A pesar de la oscuridad, Octavio conoce exactamente lo que cada tortuga está haciendo ¡es sorprendente!.Aprendimos que no solo hay que ver sino también escuchar. Cuando la tortuga comienza a cavar su nido, esta tira arena muy lejos usando las aletas frontales largas, el sonido es muy característico. Nos acercamos a dos de ellas para escuchar y ver mejor, ¡Hasta recibimos una lluvia de arena!; entonces ella cava un hueco más chico donde pondrá los huevos, usa las aletas traseras y hace un sonido más suave. Cuando pone los huevos esta no se mueve. Octavio va explorando un poco más lejos y luego regresa para decirnos que una gran tortuga verde está poniendo; nos acercamos ¡es enorme!, de acuerdo con lo que Octavio estima pesa más de 100 kg. Gateamos suavemente por detrás, Octavio cava en la arena para exponer los huevos que están en un hueco; luego pone su linterna en el hueco y una nos ofrece una vista espectacular. Todos estos huevos redondos y bonitos como pelotas de pin pon que caen una a una; el hueco se llena rápidamente...!Sorprendente!. Cuando la tortuga estaba casi finalizando el enterramiento de sus huevos, Octavio marca la aleta frontal derecha antes de que se vaya, luego se va del nido y la seguimos a través de la playa en su caminata hacia el mar hasta que desaparece en el agua. Entonces regresamos al nido para recolectar los huevos que Octavio traerá de regreso a la granja de las tortugas para incubación.Existen 117 en incubación y solo uno está dañado. Estabamos de regreso al Hotel aproximadamente a las 1: 30 de la madrugada trayendo con nosotros 116 pequeños tesoros Aquellos que vayan a Cayo Largo dentro de dos meses, o sea, a principios de septiembre), quizás puedan ver en las piscinas de la Granja estas pequeñitas tortugas que estarán ahí por un tiempo antes de devolverlas al mar. Que vivan nuestros pequeñines! Esta noche permanecerá en nuestra memoria para siempre.... Gracias a Lily y a Normand por tan bello reportaje. Delegación Mintur |
|